viernes, 8 de octubre de 2010

TARA SUS DIFERENTES ASPECTOS.....SEGUN LOS BUDISTAS



TARA; "AQUELLA QUE AYUDA A ATRAVESAR

Tara es un nombre sanscrito cuya raíz Tri significa en el causativo "hacer atravesar", "hacer alcanzar la otra orilla", en sentido propio como figurado, de ahí el sentido general de "salvar, socorrer, liberar". El nombre tibetano correspondiente es Dreulma o Drölma; tiene el mismo sentido que Tara, ya que el verbo del que deriva significa "salvar, hacer atravesar". Tara es por lo tanto: "aquella que hace atravesar (el océano de las existencia)" o también "aquella que hace alcanzar (la otra orilla en la que cesan los estados condicionados de la existencia)"
Principio femenino de liberación, perfección de la sabiduría, madre de los budas, protectora del Tibet, Tara es la mayor dama-yidam del panteón tibetano.
Según la leyenda, Tara la bodhisatva habría nacido bajo los rasgos de la princesa "Luna de sabiduría", que decidió hacerse monja. Los monjes le aconsejaron orar para obtener un renacimiento más propicio en un cuerpo masculino. Ella les respondió que en la realidad última, no existen ya ni hombre ni mujer así como no existen el "yo" y el "mio", e hizo voto de continuar manifestándose en un cuerpo de mujer para ayudar a todos los seres, hasta que el océano de la existencia samsárica se seque.
También se dice que nació de una lágrima vertida por Chenreri (o Avalokiteshvara) el buda de la compasión, del cual ella es una emanación. El nombre Tara, que quiere decir estrella, es interpretado como "aquella que ayuda a atravesar" (el océano del samsara), la salvadora, la liberadora. Tara vuela al socorro de todos aquellos que la invocan en la adversidad, o, como lo dice el sabio indio Chandragomi en el siglo VII, "Aya Tara responde instantáneamente a todas las oraciones desinteresadas. Los deseos egoístas corren el riesgo de tomar algo más de tiempo..."
Las dos formas más conocidas de Tara son la verde y la blanca, así como 21 manifestaciones que son objeto de una bella plegaria. La Tara verde protege de los miedos, de los peligros y de los enemigos, que ella doma pacíficamente. La Tara blanca es invocada a menudo para obtener curación y longevidad.
Arquetipo del principio femenino, Tara ha podido ser aceptada en tanto que buda femenino gracias a la aparición del tantrismo. Su culto se ha desarrollado en el Tibet en el siglo XI, bajo la influencia de Atisha, fundador del la orden Kadam, precursor de los Gelugpas. Pero ya en el siglo VIII, Guru Padmasambhava, padre del budsmo tibetano dijo que "es necesario un cuerpo humano para alcanzar la iluminación. Hombre y mujer, no hay diferencia. Pero para quien está decidido a desarrollar el espíritu del despertar, un cuerpo de mujer es más favorable".
EL DOBLE ASPECTO DE LA DIOSA TARA
Tara Verde
Dos aspectos se despliegan en ella: la estrella terrible en la noche de la cólera o la Gran Bella Dama llamada "Estrella que salva".
Tara es considerada como el segundo Objeto del conocimiento transcendente hindú, pero también como la gran diosa del budismo tibetano. Como Kâlî, ella puede ser o bien la estrella feroz que consume a los malvados increyentes o la Luz que lleva a la otra orilla al buen viajero amenazado por los elementos desencadenados.
Como la doble Kâlî, surgida de la Gran Diosa Devî, puede devorar y regenerar los mundos, o mosrarse como la diosa que consuela y apacigua a aquellos que tienen hambre.
Como Kâlî la guerrera, ella domina la potencia del tiempo, santifica los sufrimientos del hambre y el vacío corporal creado por la ascesis para la ofrenda de sacrificios con el fin de enseñar al cuerpo la obediencia y la supremacía del espíritu. La potencia de Tara es tal que puede destruir todo un sistema solar.
"Ella es el gran vacío, la Estrella de la cual Todo fue gradualmente formado y que conduce a Todo hacia la liberación del ciclo sin fin ..." (Mahâsundarî Tantra)
"Ella que merece ser servida por el Ser Inmenso (Brahmâ), el Inmanente (Vishnu) y el transcendente (Maheshvara), Ella que crea, nutre y destruye el mundo, que sostiene el Universo, Ella que quita el miedo asociado a la existencia, Ella: la energía suprema que ella solamente puede evitarnos nacer indefinidamente... Ella es el recipiente que nos permite atravesar el Océano del mundo" (Tantra citado en el Târâ-rahasya, Kalyâna, Shakti anka).
Como Vishnu y Shiva, Târâ puede a la vez aparecer bajo la forma de una criatura de Total Belleza para pedir al Rey de reyes que reina sobre el vasto universo...
¡O puede aparecer como una bruja de cuatro manos en pie sobre un cadaver que mantiene en una mano una cabeza cortada, en la segunda una espada, en la tercera un loto azul y en la cuarta un recipiente de mendigo! ¡Sus cabellos rojos en desorden están entremezclados con serpientes azules venenosas. Sus ojos rojos llameantes recuerdan a las llamas del infierno mientras que su frente está ornada con una corona de calaveras blancas
Visión terrible que va de la mayor de las bellezas a la pesadilla llena de espantos y horrores...


Ya considerada como Estrella Madre en el Brâhmânda Purâna bajo la forma menos espantosa, ella es sobre todo venerada por los Jaînas y los monjes budistas que practican el ayuno severo y han renunciado definitivamente al mundo.
Para la secta Vestida-de-Blanco (Shevtâmbara) ella es como un hada que protege al profeta Suvidhinâtra.
"Viendo en la nada de la vida terrestre el fin del universo, los sabios se apartan del mundo ilusorio para fundirse en el vacío, en la forma inmutable de la Inmensidad" (Târâ- Rahasya)


LOS OCHO PELIGROS DE LOS QUE PROTEGE TARA
1.- El miedo del león de la arrogancia (o sobreestima de si mismo)
El rey de los animales está bajo la marca del orgullo, y los pequeños animales tienen miedo de él. De la misma manera nosotros debemos tener miedo del orgullo que nos hace despreciar a los otros y arriesga de hacernos renacer entre los dioses. Ciertamente los dioses (deva) gozan de una gran felicidad, pero esta felicidad no es la Liberación y el ciclo de la transmigración (sâmsara) no se ha terminado para ellos.
2.- El miedo de la serpiente de los celos
Lo mismo que las serpientes tienen su nido en los agujeros y no salen de ellos más que para picar, de la misma manera, los celos, que tienen su nido en la ignorancia, no soportan los bienes y las cualidades de los demás. Los celos hacen renacer en el lugar de los titanes o de los semi-dioses: estos se envidian entre si y se baten sin cesar.
3.- El miedo del elefante de la ignorancia
Por lo mismo que hay que controlar al elefante para que se vuelva útil, así debemos ser vigilantes hacia nuestro mental que por ignorancia nos hace acumular numerosas negatividades y pude hacernos renacer entre los animales.
4.- El miedo del océano del deseo-apego
Erramos en la existencia como náufragos en el océano: estamos en las tormentas y sufrimos el nacimiento, la enfermedad, la vejez y la muerte. Y sin embargo estamos firmemente atados a esta vida y a sus condiciones desastrosas. Este deseo-apego es característico de la condición humana: si no es superado, el riesgo es el de renacer en este estado humano.
5.- El miedo de las cadenas de la avaricia
Estamos nosotros encerrados en el samsara como ladrones en prisión, y en lugar de buscar la Liberación, nuestras almas se apegan a todos los bienes de este mundo que son otros tantos obstáculos sobre el camino de la Budeidad. La avaricia hace renacer en los pretas o espíritus avidos.
6.- El miedo del fuego del odio
El fuego del bosque destruye todo si el viento lo favorece; de la misma manera el odio tiene el poder de destruir en nosotros todos los potenciales positivos que no han sido consagrados al bien de todos los seres. El odios hace renacer en el lugar de los demonios en los infiernos más profundos.
7.- El miedo del fantasma de la duda
Las dudas y los puntos de vista cambiantes nos vuelven irresolutos en el sendero de la Liberación: semejantes a fantasmas, estos puntos de vista nos provocan miedo y perturban a la vez nuestros cuerpos y nuestras almas
8.- El miedo del ladrón de los puntos de vista falsos
Como los ladrones en la orilla de los caminos, los puntos de vista falsos, tales como el hecho de no creer en la ley de la causalidad o de creen en la existencia intrínseca de los agregados, nos esperan para quitarnos los puntos de vista justos y perdernos en el camino del despertar.

NOTAS ACERCA DE LOS 21 ASPECTOS DE TARA
Tara tiene 21 emanaciones primarias cada una de las cuales lleva a cabo diferentes actividades. Los diferentes colores de estas 21 Taras corresponden a 4 tipos de actividad iluminada.
Tal como dijo el Ven. Kirti Tsenshab Rinpoche, Tara es la Buda femenina de actividad iluminada de las que hay de 4 tipos: pacificadora, incrementadora, vencedora y airada, cada una representada por un distinto color.



- El blanco representa la actividad pacificadora, por ejemplo, vencer a enfermedades, causas de muertes prematuras y obstáculos para el éxito en nuestra vida o en nuestra práctica.



- El amarillo representa la actividad de incrementar las cualidades positivas para una larga vida, paz, felicidad y éxito en nuestra práctica del Dharma.



- El rojo representa la actividad de poder o vencer las fuerzas externas que no pueden ser dominadas por las dos anteriores, por ejemplo, la eliminación de obstáculos en la enfermedad, muerte prematura, etc., y acumular enérgicamente condiciones para nuestra práctica del Dharma.



- El negro representa la actividad airada, que incluye usar métodos enérgicos para llevar a cabo actividades para propósitos de iluminación que no pueden ser llevados a cabo por otros métodos.


Fotografía de la estatua de Arya Tara

3 comentarios:

  1. ¡¡BUENO,BUENO!!
    He quedado impresionada con tu post,amiga.
    Madre mia,lo que trae consigo tu nombre...!
    Espero que esa preciosa imagen de artesanía,te inspire siempre y te libre de egoísmos,celos,miedos,envidias y demás.

    Pienso que, de alguna manera estás tocada por la varita mágica de la diosa y guardas en ti grandes talentos...SIN DUDA ALGUNA...!!

    Te dejo mi felicitación en este día de convivencia bloguera por compartir tan bello texto.Y por supuesto, mi abrazo inmenso.
    Feliz fin de semana,Tara.
    M.Jesús

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  2. Jajajajajaj gracias cariño, quise escribir algo en este dia de convivencia bloguera,pero no es referente a mi nombre ,eso es solo coincidencia, Tara es una divinidad budista....y mi nombre es una pequeña ardilla comoves son iguales y diferentes a la vez,mi nombre fue el toten que me pusieron los scouts hace muchos años,ya me gustaria ser tan poderosa como Tara blanca .Besitos

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  3. Gracias.
    Todo un detalle por tu parte esa extensa explicación.
    Tara, otra gran diosa de ese bello y armonizado universo.



    Un abrazo.

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